Herramientas para la gestión del Bosque Urbano del Área Metropolitana de Mendoza: estrategias digitales para guiar la mejora del arbolado

Título

Herramientas para la gestión del Bosque Urbano del Área Metropolitana de Mendoza: estrategias digitales para guiar la mejora del arbolado

Editor

Universidad de Buenos Aires. Facultad de Ingeniería.

Fecha

2024

Extensión

8 p.

Es parte de

5° Encuentro Nacional de Investigadores de Agrimensura. ENIA 2024 (UBA)

Resumen

El arbolado público del Área Metropolitana de Mendoza conforma un valioso socio-ecosistema que aporta múltiples beneficios a la calidad de vida urbana, entre estos se encuentran la reducción de la temperatura, la mejora de la calidad del aire, la regulación de la iluminación natural. Además, este entorno de calles con acequias y arbolado es un atractivo turístico y patrimonio cultural. La necesidad de conservación y mejora del arbolado se ve ampliado en un contexto de cambio climático y de usos del agua del oasis. La investigación se apoya en análisis espacial con herramientas avanzadas de Sistemas de Información Geográfica (SIG) y teledetección, a la vez de integrar el conocimiento de referentes y gestores del arbolado. El Sistema de Gestión digital del Arbolado Público “Mi Árbol”, implementado en 2021 es un gran avance hacia la gestión digital, sin embargo, se han identificado aspectos que dificultan su uso efectivo en la gestión, entre ellos, la relación de recursos humanos y los errores detectados en las mediciones, así como la falta de actualizaciones de eventos importantes como caídas de árboles o erradicaciones. Estas deficiencias afectan la fiabilidad del sistema y obstaculizan la capacidad de toma de decisiones informadas en la gestión. La medición precisa del arbolado y de las características del entorno es fundamental para el desarrollo de indicadores que optimicen la gestión del arbolado urbano. Al implementar métodos de cuantificación que incluyan el análisis de la densidad de árboles, la cobertura de canopia, la biodiversidad de especies y las condiciones del entorno, se pueden obtener datos relevantes que permitan evaluar la salud del ecosistema urbano. Estos indicadores no sólo facilitan la identificación de áreas críticas que requieren intervención, sino que también permiten establecer correlaciones entre el arbolado y factores ambientales, como la calidad del aire y la temperatura. De esta manera, una gestión basada en datos objetivos y medibles promueve la sostenibilidad del arbolado, maximizando sus beneficios ecosistémicos y mejorando la calidad de vida de la población.