Efectos por causas naturales sobre mediciones GNSS durante la tormenta magnética del 11 de mayo de 2024

Título

Efectos por causas naturales sobre mediciones GNSS durante la tormenta magnética del 11 de mayo de 2024

Editor

Universidad de Buenos Aires. Facultad de Ingeniería.

Fecha

2024

Extensión

7 p.

Es parte de

5° Encuentro Nacional de Investigadores de Agrimensura. ENIA 2024 (UBA)

Resumen

La actividad solar tiene una gran influencia sobre la vida en la Tierra. Nuestro planeta posee su propio campo magnético que se ve afectado por el viento solar, por su densidad y por su velocidad. A medida que se desarrollan nuevas tecnologías que dependen en cierta medida de un comportamiento normal del campo magnético terrestre, cualquier perturbación del mismo ocasionará problemas para la utilización de las mismas. Aunque no es posible conocer cuándo ocurrirá una tormenta solar, se sabe que el Sol se encuentra en su máxima actividad entre 2024 y 2025. Cuando una perturbación proveniente del Sol origina una tormenta geomagnética, diversos sistemas sufren las consecuencias. Entre ellos, el sistema global de navegación por satélite (GNSS). Las señales de este sistema deben atravesar la ionosfera, que se ve alterada en su cantidad total de electrones, por lo que la trayectoria de las señales puede ser muy distinta de la esperada. En este trabajo se estudia el efecto de las perturbaciones geomagnéticas en las mediciones con GNSS, a partir de la comparación de las coordenadas resultantes de una medición diferencial, con las coordenadas “verdaderas” de un punto. Se realizaron procesamientos para días tranquilos y perturbados, tomando algunos vectores cortos y otros largos de la red RAMSAC, en distintas regiones de la República Argentina. Se analizaron los desvíos en latitud, longitud y altura, se analizó sus desviaciones en el día de la tormenta respecto del día anterior para comparar. Estudios de la ionosfera y del TEC o Conteo Total de Electrones reforzaron los resultados. Los desvíos GNSS fueron más pronunciados el 11 de mayo y dependieron de la ubicación y orientación de los vectores. En particular, para la tormenta geomagnética del 11 de mayo se observa que en el norte de Argentina los desvíos son mayores que en el centro y el sur, lo cual podría deberse a la cercanía al ecuador magnético y a la influencia de las variaciones del campo magnético terrestre, que son más intensas de norte a sur en esta región durante el otoño en el hemisferio sur. Además, se destaca que los vectores con orientación norte-sur presentan mayores desvíos que aquellos con orientación este-oeste, alineándose con la dirección de las perturbaciones magnéticas predominantes. Las desviaciones máximas se registraron en la componente de longitud, alcanzando hasta un metro en el norte, mientras que en altura y latitud los desvíos fueron menores, con máximos de 56 cm y 17 cm, respectivamente. Dos días después de la tormenta, el 12 de mayo, los desvíos ocasionados por el evento geomagnético ya no son evidentes en la mayoría de los vectores, aunque algunos vectores con orientación norte-sur aún muestran variaciones, lo cual podría explicarse por una ionósfera que no se ha recuperado completamente, como sugiere la evolución del índice Dst, que no se normaliza hasta el 16 de mayo